viernes, 27 de junio de 2014

Los misterios de la antigua Londres



Bueno esto es una pequeña historia que sucedió en mi imaginación mientras charlaba con Vanessa, la autora de Merodeadora en línea , es increible como pueden surgir estas cosas repentinas.

Un saludo y en breve en estos dias estare publicando varias cosas


-Me veo bien Señor Watson -

- Te ves bien Sherlock -

- Todo acorde, sobrero prolijo, estoy despeinado? -

- Te vez bien Sherlock, ya lo he dicho -

- Si el sospechoso se da cuenta, podria no tomarme en serio -

Formaban una pareja singular conformada por el alto, flaco pero analista detective Sherlock Holmes y su fiel ayudante petiso , el señor Watson, muy distinguidos por los casos llevados a la corte en toda Inglaterra. Por alguna razón , a Sherlock le gustaba investigar durante la noche. Tenia la certeza de que durante la noche las pistas no desaparecerian pero aun asi, era ciego como un topo asi que Watson iba tras el a iluminar el rastro.
Dias atras, la policia londinense habia descubierto un cuerpo inherte flotando y con el cuello atado a una bolla, el panorama era terrorifico pero nada asustaba a Sherlock, ni siquiera su suegra.
Aquella persona era su principal sospechoso, un escritor realmente extraño que nunca salia de casa y sus obras eran tan tetricas que costaron en venderse.
El viejo Sheskpeare era gordo, canoso y tenia un aspecto desagradable.

- Buenas tardes señor Shakespeare, mi nombre es She... -

- Y tu quien eres? - respondió

- Soy el detective Sherlock Holmes y el es el Doctor Watson -

- Valla, haci que un doctor y un detective vienen a molestarme esta noche, a que debo la visita -

- Podriamos pasar , le haremos un par de preguntas - dijó Watson mientras pensaba con que cargos lo encarcelarian si golpeaba a es viejo.

Su casa practicamente eran paredes de libros y papeles, el piso de madera tenia una capa de suciedad impregnada que Watson no dudó en evitar, tenia muchas alergias. El señor Shakespeare despejo un poco el sofa medio destrozado y invitó a sentarse a estas dos personas que arruinaban su noche.

- Ahora vamos al grano, que quieren? -

- Bueno usted es un señor extraño y todos los vecinos lo verian de seguro como un malechor, de esos que lastiman a las personas - dijo Sherlock

- Que me esta diciendo, soy un simple escritor, como se atreve - respondió intentando parecer enfadado pero Sherlock comenzó con su analisis visual y sacó varias deducciones.

- Parece cansado señor.... -

- William -

- Señor William, estuvo haciendo ejercicio o realizando algun esfuerzó esta tarde? -

- No no, solo he escrito algunas cosas - respondió sorprendido, el detective se percató de ello

- Tiene tierra en sus zapatos - intervinó Watson

- Un descuido solamente -

- Ya veo, que me dice de la mancha oscura en la parte de atras de su abrigo ? -

- Me salpicaron con combustible señor Watson -

Mientras Watson matenia el dialogo, Holmes caminaba por la casa observando las notas y trozos de obras del autor, en todas habia un toque tragico y parecia que incluso, habia estado en cada una de ellas de alguna manera.
Pasó una media hora y se acercaba la media noche, Sherlock lanzó una bomba para poder ver las reacciones de su sospechoso.

- Sabe William, esa mancha se la hizó cuando se dio cuenta de que habia asesinado a aquel hombre, intento colocar el abrigo en la herida pero se terminó desangrando, la suela de sus zapatos esta embarrada y encontrarmos la parte de una huella cerca del puerto, en un charco, usted esta tan nervioso que dedusco que penso toda la tarde en que llegaria la tarde y dos personajes tan sofisticados como nosotros llegarian a su puerta , estoy en lo cierto señor William -

- Yo , yo ... -

- De seguro querra mas explicaciones - dijó Watson

- Si si, como se atrevé detective - respondió preocupado , comenzabá a sudar.

- Usted es un escritor tragico Shakespeare y utilizando como ejemplo la historia de Romeo y Julieta en este caso. Antes de venir lo investigamos y sabemos , que usted tenia cierto aprecio por nuestra victima. Mientras usted se descuidaba, yo y el señor Watson atamos cabos y aqui estamos pero por favor, no nos obligue a traer una patrulla, el jefe Gordory no es alguien a quien quiero molestar una noche como esta asi que hagame el favor de ir por su abrigo- dijó Sherlock mientras golpeaba a Watson con su baston y lo obligaba a levantarse.





viernes, 20 de junio de 2014

Los misterios de la secundaria 232 Parte 1

Bueno lectores les debo muchas disculpas. No hay excusas y nada de que estuve complicado con los parciales del liceo. Pero como saben , es realmente difícil escribir y mas aun presionado y por eso ahora me estoy tomando el tiempo necesario para poder lograr mejores cosas y nunca dejar de defraudarlos. Aun así intentare publicar intermedios en varias ocasiones para no dejarlos sin nada o , otra cosa que les recomiendo es que visiten los blogs que encontraran en la barra derecha del blog, son realmente interesantes y sorprendentes.

Un saludo y les diré que la segunda parte la publicare en pocos días, no quiero dejarlos con la intriga


Los misterios de la secundaria 232 


Cuatro años llevo ya en este liceo y un centenar de cosas me pasan por la mente. Por ejemplo, que hay detrás de la puerta numero 4, pero siempre el director Bigote, como lo llamábamos nos descubría y nos echaba prácticamente a patadas del lugar. Pero allí estábamos Pancho, el Tano y yo, el mas chico por estar en 4to grado pero el mas curioso del grupo.
Este liceo es bastante secreto. No lo sabemos con seguridad pero hay ciertos rumores de que el ejercitó había trabajado en un proyecto secreto debajo de este lugar y estábamos decididos a averiguar mas sobre el tema. Pero, cada vez que nos topábamos con un adscrito la respuesta era la misma "No existen tales cosas chicos" , ni siquiera se las ingeniaban para dar mejores respuestas. Y valla que era difícil. Los supuestos pasillos secretos se encontraban en la zona prohibida y con suerte lograbas entrar hasta el pasillo central pero por alguna razón alguien siempre se enteraba.
Pero en uno de esos recreos largos que se nos permitían, comenzamos a trazar un plan.

- Bueno Tano ,que tienes para mi? - dije

El Tano que en realidad se llamaba Luca Toni, había llegado desde Italia hace un año atrás y era el menos experimentado pero  en que en cuestión de minutos puede conseguirte la información que desees.

- Recuerdas al gordito de primer grado Rocky ? - dijo

- Si si , que sucede con el ? -

- Sucede que es el hijo de Bigote y sabe algunas cosas -

- Conseguiste algo? -

- Dice que las cosas tal vez se encuentren en la casa del inspector -

- Del inspector? , esperas que nos metamos como ladrones en su casa para robar los planos? -

Se nos dibujaron expresiones de horror en el rostro, seria mas difícil de lo que pensaba. Pero nada era imposible. Por suerte el inspector vivía en la cuadra de mi casa, seria pan comido espiarlo.
Me fui temprano por la tarde después de mantener una charla interesante con el barrendero del lugar, un anciano llamado Pedro. Llegué a casa con la cabeza revuelta. Pues había sido una semana realmente dura plagada de exámenes y tareas. Así que por ser viernes, la tarde consistió en una cita con el sofá y un maratón de películas sin sentido. Mas tarde , subí a mi habitación , salte dentro de la cama y me revolví entre las sabanas hasta que caí dormido.
Es mañana  era el inicio de uno de los tantos fin de semana largos del año y apenas observé por la ventana me di cuenta de que había un frió para morirse, gran comienzo. Desayuné unas tostadas con mermelada y salí a dar una vuelta matutina por el barrio. Disculpen, se me olvidó un detalle, yo no soy de aquí en realidad. Nací en otra ciudad cercana pero me vine a vivir aquí después de terminar la escuela, a mi parecer me adapte bastante rápido aunque aun hay ciertas cosas que se me dificultan, por ejemplo, ser reconocido.
Comencé a caminar a lo largo de la vereda mientras observaba el humo de las chimeneas dispersarse en el cielo. Según tenia entendido, el inspector vivía a pocas casas de distancia pero no tenia ni la mas remota idea de donde era, nunca lo había visto a aquel misterioso personaje, así que me senté a esperar.
 Dos horas y nada. Me limite a observar a las personas que de vez en cuando salían por un recado y volvían huyendo del frió pero en un momento mire a lo lejos y divise una casa extraña a la vuelta de la esquina. Me acerqué un poco mas. Era una casa antigua y misteriosa. El color de las paredes era de un rosado desgastado y la madera parecía perder la pintura blanca frente a mis ojos. Me senté un momento a ver mejor el panorama y cuando me cerciore de que nadie me veía me acerque un poco mas hasta llegar a una de las ventanas del costado. Eché una ojeada en el interior, nada sospechoso pero después de convenceré de que nada extraño pasaba una mano me tocó el hombro y me llevé un susto tremendo.
Un anciano me observaba a pocos metros con un rostro de intriga e indignación

- Hey chico que haces aquí?
- Lo siento señor, solo que nunca había visto su casa -
- Ah , bueno , en eso tienes razón -

Su rostro se tornó mas calmo y con una mano se acarició la barba.

- Bueno chico como te llamas? -
- Rodrigo -
- Rodrigo quieres unas galletas? -

Mi madre siempre me había dicho que no aceptara cosas de extraños pero el anciano parecía inofensivo y nadie resiste la tentación de comer unas galletas, tal vez de chocolate así que de inmediato acepté y entramos a la casa. Era increíblemente grande y bastante extraña. Afuera parecía una casa decrepita, lista para ser destruida pero adentro eran habitaciones de tiempos antiguos con una pulcritud impresionante.
Algo que me llamó la atención desde el principio fue un cuadro inmenso al final de las escaleras que daban al segundo piso, era muy antiguo y mostraba a un hombre serio pero de gran carácter con un traje de soldado, lo reconocía de alguna parte pero en el momento me parecía una simple pintura.
Lo seguí hacia la cocina, que era también muy antigua donde me entrego unas galletas grandes y de chocolate.

- Veo que te llamó la atención la pintura - dijo
- Bueno, me parece conocida -
- De seguro que si, que pensarías si te dijera que tiene 100 años? -
- Bueno señor, usted no es tan viejo -

En ese momento comenzó a reír y después le seguí la corriente. Parecía un hombre sorprendente y sabio y por el rostro le calculaba unos 80 años pero parecía alguien mas joven. Nos sentamos a hablar de historia y me contó ciertas historias asombrosas de el país y de la ciudad que nunca había escuchado antes pero cuando me di cuenta ya era tarde y regresé a casa casi corriendo con la promesa de volver en unos días.
Mi madre me regaño de tal manera que no necesito hablarme para enviarme al cuarto sin cenar.
Al día siguiente me levante temprano como el día anterior pero en lugar de caminar hacia la casa del anciano, decidí caminar hacia la otra dirección pero sin saber que buscar.Cuando de pronto , mientras me distraía observando las casas en busca de pistas me pegué contra algo y caí hacia atrás.

- Diablos , que ocurrió -

- Lo mismo pregunto - dijo una voz misteriosa, parecía ser una chica.

- Lo siento, iba distraído, te ayudo a levantarte - dije

Tome sus manos y la jalé hacia adelante, casi nos caemos otra vez. Estaba seguro de que conocía a esa chica, tal vez del colegio o del mercado de los domingos, puede ser pero aun así me impresionó su tranquilidad, asumo que cualquier chica que conociera si la hacia tropezar me daría una cachetada en la cara y por suerte no tropecé con un chico de 6to grado , sino ya estaría metido en el basurero de la esquina.

- Como te llamas? - dije sonrojado

Ella sonrió y con toda serenidad me dio su nombre

- Me llamo Andrea y tu? -

- Rodrigo , siento lo del golpe - en ese momento estaba avergonzado y lo único que quería hacer es volver a casa pero ella sonreía, estaba tranquilo. - eres de por aquí? -

- Si , vivo en aquella casa en la esquina -

Se nota que era muy distraído porque tampoco había visto aquel lugar. Era una casa majestuosa y aun mas grande que la del anciano y pulcra como si recién hubiese sido construida. Por cierto, de seguro querrán saber el aspecto de Andrea y responderé a su curiosidad. Era una chica de mediana estatura, de pelo castaño y con unos ojos celestes que podría decirse, eran casi como perlas. Mientras pensaba, no me di cuenta que me hablaba.

- Rodrigo ? , Rodrigo? , estas ahí ? -

- Si lo siento, estaba pensando en algo, que decías? -

- Si vives cerca de aquí -

- Si , vivo a la vuelta de aquella esquina -

- Me darías tour por el barrio? , es que soy nueva aquí -

Complacido y con unas ganas incontrolables de tomar su mano, quien sabe por que , acepte y ambos salimos en la dirección en que iba en un principio. Resulto ser alguien tranquila, divertida y ambiciosa, la ultima vez que conocí a alguien así fue..., quizás hace 5 años , no lo recuerdo. Según las palabras de Andrea, venían de una ciudad cercana que desconocía y sus palabras siguientes me descolocaron por completo

- Mi padre es el inspector -

Nunca creí que fuera tan fácil, pero claro, no era tan simple como parecía. Continuamos  por el mismo camino innumerables cuadras mientras ella me contaba un poco mas y yo intentaba seguir la conversación mientras pensaba en las cosas que habrían en su casa. Horas después, mientras anochecía rápidamente llegué a casa , comí lo primero que vi y me recosté a leer sobre la cama.Y seguro que no les había dicho que me fascina leer. Y por leer me refiero a diarios, revistas, libros y hasta guiones en internet. Pero claro, mis favoritos desde que era un enano de 5 años son los libros de aventuras. Y uno allí puede aprender muchas sin duda. Puede aprender de historias sorprendentes, de lugares que desconocíamos y admito que en algunos momentos me dieron ganas de huir de casa y comenzar mi propia historia.
Domingo, un día especial. Desperté tan bien que parecía rejuvenecido y porque eran especiales los domingos? , bueno porque es el único día de la semana en que se me permite descansar y si quiero, podría quedarme todo el día en la cama mirando por la ventana pero aunque la idea resultara tentadora desayuné y partí hacia la casa del anciano. Pero desafortunadamente no se encontraba en casa así que sin una segunda opción fui a la casa de Pancho que de seguro estaría jugando al fútbol en el patio trasero.

- Pancho , estas ahí ? - dije

- Si , pasa Rodri -

Y ahí estaba, dándole pelotazos a la pared mientras su madre le gritaba desde la cocina. Y quiero que sepan que su apodo no era porque fuese gordito sino que al contrario, era alto y colorado, un pancho.

- Le das y le das a la pelota hermano, piensas llegar a la selección ? - se lo debí de haber dicho unas 20 veces porque realmente no sabia jugar pero el aun así , seguía y seguía.

- Muy gracioso, pero te prometo que algún día me veras por televisión , y olvídate de las entradas -

Ambos nos echamos a reír, era mas probable que un perro llegara a la luna antes de que eso sucediera





miércoles, 11 de junio de 2014

Escucha

Milagros Martinez 
Santiago Bianchi


Nunca juzgues ah los demás, por aptos y decisiones que ni siquiera sabes cuál fue el motivo. Es difícil de creer. Es difícil darle un giro a nuestras opiniones y contradecirnos nosotros mismos debido a lo que se nos muestra día a día. Es difícil darse cuenta de las cosas que decimos de las personas sin saber, que sentimientos tiene y que intensión tuvo. Acaso no escuchamos a nuestro corazón y dejamos que la mente actué sin nuestro consentimiento? .Ahí veces que dejamos , que la cabeza hable antes que el corazón sienta. Pero existe la esperanza, de que uno logre darse cuenta, y en algunos casos sucede sin saberlo y en otras el destino crea situaciones perfectas. Hay veces que lo único que tienes que hacer es  escuchar y darte cuenta de las cosas como son. Usar los sentidos, escuchar, en lugar de evadir. Ahí es cuando te das cuenta, y es mejor conocer ah las personas.


martes, 10 de junio de 2014

Aguas de felicidad

Realmente es un placer poder hacer esto junto a una persona que realmente siente amor por el deporte

Autores: Milagros Martinez y Santiago Bianchi

El agua, la fuerza y destreza se combinan para lograr algo fantástico que siento día a día al momento de lanzarme hacia las aguas transparentes. Es Como una Segunda Vida. Bajo el Agua ,  donde solo, lo único que tienes que hacer es nadar y nadar sin parar. Pero, cada esfuerzo, cada gota de sudor y de energía que pierdo, se convierte en felicidad. Y como a muchos atletas ,que durante los días difíciles se sientan a observar con tristeza la pista, es duro para un nadador alejarse de sus aguas, de su hogar. 
Por eso cada día, es un privilegio y como dicen " Nadar y nadar , es como una suerte hacerlo cada día!"
Y si algo he aprendido de tantos años es que nadar es mi ser y lo va  ah ser para toda la vida

jueves, 5 de junio de 2014

Un final impredecible

El doctor estaba allí frente a su escritorio en una noche que no parecía traer nada interesante. Su mano recorría los archivos implantando su firma en un montón de papeles mientras que con la otra sostenía una taza de café cargado.
Era una noche larga y fría de invierno pero nada evitaba que aquel hombre leyera su novela, en su auto que parecía una nevera. El hombre tenia los labios secos y temblaba pero aun así intentaba concentrarse en las palabras. Pero su mente se oponía a aquella historia y le invadían pensamientos tristes y desoladores sobre su vida, sobre su futuro y hacia donde huiría de esta depresión que le amenazaba. Junto a varias latas de cerveza y un objeto frió y oscuro el esperaba.
El papeleo lo agotaba y necesitaba llegar a casa así que se levantó de la silla, tomó el abrigo de la silla y salió por la entrada a toda prisa hacia el auto. La calle estaba desierta y no tardó en llegar a casa. Encendió las luces, cerró la puerta, se preparo un café y se sentó frente al televisor, era lo mejor que podría hacer, vivía solo.
El hombre estacionó su camioneta frente a la casa y después de un suspiro bajó de la camioneta con el objeto en mano. Esa noche era sinónimo de silencio, las calles tenían un aspecto fantasmal y desértico, una noche perfecta.
Un canal trasmitía un maratón de suspenso y aquel hombre se encontraba tenso buscando lo mas cercano para apretar, por un momento se le paso por la cabeza cambiar de canal pero ya era un hombre de 40 años que nunca había visto una película de terror, era el momento de dejar ese temor que lo aquejaba.
Pasos silenciosos, pasos siniestros y temerosos, pasos temibles, el hombre tocó la puerta, el doctor se llevó el susto de su vida pero se levantó y abrió la puerta, nunca se esperó aquello.

- Suegrito , que haces por acá? -

La musica en nuestras vidas

Buenas tardes lectores. Siento atrasarme tanto con las publicaciones y cuando leeia un poco los blogs de varios colegas me di cuenta de lo mismo, todos estamos complicados con el liceo. Pero aun así los momentos libres siempre aprovecho para avanzar en algo y les voy a decir que estoy trabajando en algo especial, un poco mas largo y mas difícil pero que espero que resulte. Hace tal vez ya un mes tal vez publiqué una entrada sobre la música pero sinceramente no lo recuerdo. Pero como todos dicen , una vez mas no hace daño alguno así que en este caso hablaremos mas profundamente de esto que para unos puede significar una parte de sus vidas.
La música es especial. Puede cambiar nuestro estado de animo y elevarlo a los aires en pocos segundos. Les diré que cuando escribo escucho música celta. Y de seguro les resultara extraño pero esta clase de música es emotiva, interesante y a su vez produce cierto efecto en mi que vuelve mi imaginación hacia tiempos antiguos y después tomo un lápiz y como si fuera por arte de magia, las palabras fluyen con el ritmo como en este momento en que escucho a un grupo llamado Celtic Woman que me inspiró a hacer esta entrada y me gustaría que si piensan lo mismo que yo me dijeran que clase de música les hace surgir este efecto y así poder compartir esto que realmente parece interesante, como la música puede influir en verdad en todo.

Un saludo y lean tantos libros como escuchen buena música

domingo, 1 de junio de 2014

El diario de Vicanto

Durante nuestra historia se han creado cosas increíbles y inimaginables. Y hemos tenido la suerte de poder saber con certeza que muchas de ellas son reales y otras, simplemente fueron olvidadas como meras suposiciones.
Y una de ellas, mi favorita de entre todos los llamados mitos es una historia tan triste como sorprendente sobre dos personas que tal vez fueron mas que ello y muchas veces me gusta contar, esta no sera la excepción.
Muchos siglos atrás el monte Vesubio hizo erupción y se llevo consigo a la ciudad de Pompeya reduciendo al pueblo entero a estatuas y a los edificios a pedazos de roca y ceniza dejando un basto lugar gris y desolado. De ahí se dice que una pequeña niña llamada Adrina sobrevivió y huyó de aquel lugar. Tiempo después llegó a Grecia y paso varios años recorriendo y recorriendo las costas sin saber a donde ir. Pero en un momento, según sus palabras, una extraña figura surgió a pocos metros y poco a poco bajo una luz incandescente apareció una figura humana. Era bella y de unos rasgos definidos y claros. Poseía una cabellera rubia y unos ojos oscuros llenos de pureza. Ella se acercó sin ningún temor mientras el observaba sus pasos lentos. Ella alzó su mano y acarició su rostro puro mientras aquel hombre observaba sus facetas llenas de cicatrices. Con el tiempo, se fueron conociendo y al cabo de poco tiempo eran el uno para el otro.
Un día se dice que dos personas llegaron a la plaza y una de ellas , un hombre comenzó a llamar la atención de las personas que pasaban por el lugar llamándolos para la batalla. Adrina en su diario lo llamó Nicodemus porque después de eso llevó a las personas a ser soldados y los convirtió en vencedores. Pero después de muchos años en los que Nicodemus luchó sin recibir heridas Adrina se preocupaba y ambos decidieron dejarle el liderazgo a un joven soldado quien algún día se convertiría en Aquiles. Ambos huyeron a un lugar adentrado en el bosque de Bastia donde construyeron un lugar llamado Vicanto. Años y años vivieron allí en la tranquilidad de aquel lugar misterioso,un pequeño paraíso hasta que Adrina enfermó y Nicodemus día a día permaneció sentado junto a ella, tomando su mano y besándola hasta el cansancio.
Un día, Adrina le obsequió su ultima mirada y Nicodemus se sumió en una profunda tristeza.
Los días pasaron y el semidiós se volvía débil y poco a poco sentía como se convertía en humano hasta que en un impulso de buscar una solución encontró el diario de Adrina y lo leyó y lo leyó buscando respuestas hasta que una noche las luces de aquel lugar se apagaron y el silencio tomó el lugar por completo.